La empresa estadística de ventas de discos de anime y música Oricon ha realizado una investigación entre sus datos para determinar que tanta es la gente (japoneses) que realiza aún descargas ilegales, esto en un país donde la minoría consume piratería.
El dato, aunque para ellos un tanto alto dicen, es que solo el 28.5% de los jóvenes realiza aún descargas ilegales de cualquier tipo, es decir desde películas, música hasta libros o mangas.
El resto compra de manera oficial y legal sus productos.
Sin embargo, a diferencía de lo que pensaríamos, este número ha crecido y eso es lo que preocupa en Japón
Esta investigación también se realizó los últimos dos años, siendo que en el 2011 solo el 19.2% descargaba ilegalmente, y en 2010 era el 18.7%, es decir que el número creció significativamente.
El test es realizado a chicos y chicas de preparatoria, que rondan entre los 16 a 19 años de edad.
Esta investigación también se realizó los últimos dos años, siendo que en el 2011 solo el 19.2% descargaba ilegalmente, y en 2010 era el 18.7%, es decir que el número creció significativamente.
El test es realizado a chicos y chicas de preparatoria, que rondan entre los 16 a 19 años de edad.
En el 2010 el parlamento japonés declaró que la ley persiguiría por oficio (es decir, sin ninguna denuncia de por medio) a toda persona que realizara descargas ilegales… Por eso el número bajo en 2010 y 2011, pero ahora retorna a lo que originalmente fue antes de la ley este número.
No me imagino como sería el número aplicado en el continente americano, incluso en Europa.
Japón por cultura no maneja del todo la piratería, y esta es otra de las causas por la que mucho material proveniente de Japón es difícil de encontrar incluso en Internet.
Del 28.5% de la gente que descarga ilegalmente el 56% de ellos han sido alertados alguna vez por la ley que dejen de descargar, y aún lo siguen haciendo.
El resto nunca ha sido avisado en ningún caso de sus descargas.
El resto nunca ha sido avisado en ningún caso de sus descargas.
El 63% de los que descargan ilegalmente son estudiantes de secundaria, y el resto es de preparatoria.
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