No sé si recordaréis el caso de hace ya bastante tiempo por el cual acusaron de pederasta a un joven americano de poco más de 20 años que decidió viajar a Canadá para visitar a un amigo. El muchacho, programador y fan del manga, se encontró al pisar suelo canadiense con que la policía se puso a registrar todas sus pertenencias a conciencia, incluyendo el material que almacenaba en su portátil, en su iPhone y en su iPad. Buscando, buscando, los policías encontraron en el portátil una serie de mangas que consideraron pornografía infantil y directamente le detuvieron en el aeropuerto. Lo peor es que le acusaron no sólo de poseer pornografía infantil, sino que también de introducirla ilegalmente en Canadá.
La Comic Book Legal Defense decidió recaudar fondos y buscarle una buena defensa al muchacho, pero ahora han anunciado orgullosos que el gobierno canadiense ha decidido retirar todos los cargos contra el incauto americano. En total han sido más de 75.000 dólares los que ha utilizado la CBLDF hasta conseguir que Ryan Matheson, nombre del acusado, quedase libre de cargos.
Un alivio para él y una advertencia para todos los que viajéis al extranjero con material en vuestros portátiles. ¡Ojito!
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